miércoles, 30 de marzo de 2016

Crítica de fotografía


Fotógrafo: Kevin Carter
“La niña y el Buitre”


Esta fotografía se llama “La niña y el Buitre” y fue tomada en 1993, el título es un elemento fundamental para esclarecer el sentido de la imagen debido a, como lo dice el título, se fotografió  a una niña africana y a un buitre parado cerca de ella. El fotógrafo es Kevin Carter, nacido en Sudáfrica en 1960, a los 23 años empezó a ejercer su carrera como fotógrafo deportivo en un periódico local. Fue en New York Time que se publicó esta imagen, haciéndola viral en el mundo y así mismo siendo ganadora del codiciado premio Pulitzer del año 1993. Ésta entra a la clasificación como una fotografía social y de guerra debido a que representa la pobreza ocasionada por la Guerra de Sudan, cabe destacar que el autor es un fotoperiodista así que no pertenece exactamente a un movimiento artístico.

En esta fotografía existen dos puntos, uno va para el buitre y el otro para la niña, es por eso que se hace tensión en la composición. No se presentan líneas verticales, oblicuas o curvas pero si horizontales, aunque no se vea a simple vista pero da un espacio bidimensional para captar visualmente.  La escala de esta imagen es de plano de conjunto. También existen 3 planos-espacio, el primero es el fragmento donde está situada la niña debido a que está al frente, después es donde está el buitre parado y el tercero es el fondo que al parecer es un lugar desértico.

La forma de la foto es cuadrada y está estructurada con colores sepia y serios, con gran proyección y no cuenta con contraste tonal.  En la textura, esta fotografía es más visible el grano fotográfico, de igual forma presenta profundidad en la imagen, tal manera que, se denota la distancia entre la niña y el animal. Los seres están en reposo por lo que no se presenta el dinamismo, temporalidad, ni mucho menos de la borrosidad pero si es pictorialista.  Debido a que la fotografía fue tomada a la luz del día, la iluminación fue natural, sin necesidad de contar con luz artificial. No hay contraste, ni saturación, no obstante la imagen fue más amarillenta. El conjunto de aspectos tratados anteriormente nos permite determinar que esta imagen que se analiza es monosémica y original.

La fotografía fue tomada con angulación frontal aunque un poco contrapicada, la protagonista de la fotografía esta en una posición de cuclillas llorando en el piso y de acuerdo con Kevin, el fotógrafo,  la niña estaba siendo acechada por el buitre. La foto fue icónica, tanto que representa el sufrimiento de África y también se convirtió en símbolo de la lucha contra el hambre. Todos estos detalles que se analizaron nos hacen darnos cuenta de la importancia de una lectura crítica e interpretativa.


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